En la calle (nuestra calle) se perciben otras sensaciones y no son muy optimistas, por lo menos a corto plazo, por la inacción del consumo y las pocas perspectivas de empleo que tenemos en estos momentos.
Y un meridiano importante de lo que pueda suceder en este año 2013  (no digo nada como estarán los supersticiosos) son estos dos eventos feriales y verdaderos puntos de encuentro sectorial con matices diferenciales.
Expocadena nos permitirá conocer la situación  de este grupo, que no para de incorporar nuevos miembros, ya alcanza los 1080 asociados, pero que necesita una confirmación sectorial con el incremento o descenso de su volumen de compras en esta edición, porque el nivel de sus asociados, centrados en el nivel medio sectorial y de carácter doméstico, van a ser el principal referente de la situación. No olvidemos que sus clientes son quienes mejor conocen como marcha las vida de este país y eso se traduce en las ventas, en su mayor parte, productos de primera necesidad, excluida alimentación.
Ferroforma es todo lo contrario. No cuenta con los argumentos de una estructura privada y debe esperar al apoyo de fabricantes con su presencia para poder incentivar la visita de los profesionales de la ferretería que ya no acuden en la masificación de hace unos años.  La feria ha hecho un esfuerzo importante para  que se recupere brillo. Con los expositores  se esperaba más, es deseable que los visitantes se logre el suficiente elemento de incentivación para que se logren buenas cifras, se hagan buenos negocios y a nivel de la ferretería, iniciemos nuestra propia remontada