La escisión de Fergrup fue un primer toque de atención de que la realidad sectorial estaba cambiando. Es paradójico que ahora vayan a desaparecer ambas organizaciones y fusionarse en una sola, es decir, volvemos al punto de partida después de diez años. Aunque tampoco la realidades así, porque alguno de los miembros tradicionales ya no va a estar al tomar parte en otros grupos, e inclusive quizás alguno de los actuales componentes haga las maletas y emigre  hacia otra estructura.

En realidad, todos buscan volúmenes y forzar las cifras para obtener mejores condiciones, una tendencia asumida por el paso de los años. Hace falta que se hagan nuevos planteamientos y se esfuercen más en mejorar las condiciones del socio, rentabilidad de su negocio e inversiones que produzcan rentabilidad con un mínimo coste de las estructuras.

Quien iba a decir que la fiesta del 25 aniversario de ANCOFE sería su última gran fiesta. Atrás quedan grandes ideas, buenos profesionales, pero dentro de poco ANCOFE sólo será un recuerdo para nostálgicos de una época mejor. Esperemos que no se le eche de menos.

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